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Vivan las noches, el sol, la sal en tus labios.

jugando MAS

jugando MAS

Siempre me ha gustado investigar y aprender cosas nuevas sobre los diversos caminos que nos conducen al placer. Lo típico está muy bien y es fundamental pero en ocasiones se pueden pasar muy buenos ratos practicando ciertos "juegos" llenos de morbo y perversión sana, siempre que sea algo acordado y consensuado por las dos partes. Supongo que hay gente a la que todo esto le parece algo asqueroso o anormal, para mi simplemente es una opción más, no es algo que me condicione ni es algo que para mi sea indispensable en el sexo. Es algo que está ahí por si es necesario recurrir a ello. Completito que es uno, jeje.

Espero que os guste lo que escribo a continuación...

 

Arrodillada y sentada sobre tus tobillos con el cuerpo erguido, los hombros ligeramente forzados hacia atras y la mirada baja. Las manos apoyadas sobre tus muslos y las palmas hacia arriba. Así te encuentras esperando que te guíe por nuevos caminos anteriormente jamas recorridos por ti.

Sobre la cama y de forma ordenada has colocado diversos objetos. Me acerco a tu lado y acaricio tu cabeza con suavidad. Observo tus hermosos pechos, turgentes y generosos, veo tu juventud reflejada en ellos. 

Cojo el primero de los objetos. Es un collar negro del que cuelga una brillante cadena. Te lo coloco con suavidad apartando tu cabello. Una vez colocado estiro de él y hago que te pongas a caminar por la habitación a cuatro patas. Gateas detrás de mí. Si yo paro, tú paras, si yo ando tu gateas. Te gusta que use contigo palabras obscenas, me pides que te llame perra.  Ahora ya lo eres, caminas como una perra y lames mis pies como una perra en celo.

Siento tu lengua jugar con los dedos, el calor de tu boca hace que mi polla comience a ponerse dura. Tiro de la cadena y coloco tu boca a la altura adecuada para que comiences a adorarla como tú sólo sabes hacer. Te recreas en ello, disfrutas de cada rincón deseosa de probar mi fuente de placer. Aún no es el momento.

Te pongo de pie. Estás mojada. Quito la cadena y quedas totalmente desnuda salvo el collar negro que contrasta con tu bonita piel blanca. Con uno de los pañuelos que has colocado en la cama vendo tus ojos y noto como tu excitación aumenta. También ato tus muñecas en la espalda con otro de los pañuelos. Observo que has dejado desperguidas por la cama unas cuantas pinzas, imagino que quieres que haga con ellas...

Coloco la primera en el pezón derecho, la segunda en el izquierdo y una tercera en la lengua. A los pocos segundos un hilillo de tu fina saliva comienza a caerte sobre las tetas, veo como sigue bajando hasta llegar a tu depilado sexo, allí muere mezclándose con tu abundantes flujos que sin ningún tipo de control inundan tu entrepierna. Es el momento de colocarte en una posición en la que puedas disfrutar mucho más. Tumbada sobre la cama, atada en cruz al cabecero de la misma y con las piernas abiertas en su totalidad. Tu sexo absorbe con lujuria el vibrador casero que entre risas me enseñaste el día anterior. Tus gemidos han aumentado a cada minuto, ya no sientes dolor, sólo placer. Un placer aumentado por todas las nuevas sensaciones que te transporta a un éxtasis que jamas habías ni si quiera imaginado. 

Es el momento de probar lo que estás deseando desde el principio. Quito los "juguetes" que como objetos mágicos han hecho manar de ti sabrosos jugos. Te colocas arrodillada encima de la cama y apoyas tu mejilla en la sábana, te voy a quitar el nudo del pañuelo que inmoviliza tus muñecas pero me pides que te lo haga así.

Te penetro una y otra vez, entro y salgo ritmicamente, aumento el ritmo, lo bajo, paro, comienzo otra vez, suave, fuerte. Sujeto con seguridad tus caderas, con la palma de la mano acaricio tus nalgas y suelto un pequeño azote, quieres más, y te doy más. Creo que he perido la cuenta de tus orgasmos, llevas teniéndolos desde el comienzo de la sesión. Finalmente recibes mi caliente leche, y tu lengua no deja de saborearla mientras tus ojos se clavan en los míos fundiéndonos con el fuego que emana de nuestros cuerpos.

2 comentarios

canela -

Te estaba esperando... MAS...

:*

lolita -

diossss, mas, eres diooos!!! me he corrido leyendo el texto...genial genial genial....


bexitos